Ecotimo

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Viernes 28 de octubre. En mi barrio ha abierto recientemente sus puertas un supermercado ecológico: frutas, cafés, cereales, pastas, chocolates,… Todo muy apetecible. Tanto, tanto, que caí en la trampa y me dejé seducir por sus cantos de sirena. Al principio no supe si estaba en una tienda de comestibles o en una peluquería Marco Aldany, con aquellos lineales impolutos y aquellas luces imposibles, pero superada la desorientación inicial me vine arriba y probé a comprarme un zumo que no llegaba a los 50 ml. El susto vino cuando pasé por caja y una tal Wendy, una moza andina de sonrisa Profident, me sopló más de tres euros por el Bifrutas más saludable del mundo. Supongo que ahí radica el éxito de estos productos: son tan caros que terminas adelgazando porque ya no te queda dinero para comer.

A mí los denominados alimentos ecológicos me parecen puro marketing tras el que se esconde mucha literatura y una jugosa ristra de subvenciones. La etiqueta eco sólo sirve para que estemos dispuestos a pagar tres veces más por el mismo producto y nos sintamos rubios y bronceados como un Matthew McConaughey cualquiera sobre su tabla de surf. Y no hay quien me apee del burro. Porque tampoco me creo que no lleven fertilizantes ni pesticidas. Dicho lo cual, no sé a qué genio le habrán encargado el estudio de mercado para poner un local así en mi barrio, un barrio de clase trabajadora con más pensionistas que semáforos y que no ha visto un vegano ni en las películas de Jennifer Aniston. Al experimento le auguro una supervivencia de menos de seis meses. Porque aquí no comemos chia ni quinoa y ni mucho menos nos vamos a gastar cuatro euros en 250 gramos de café así nos lo traiga el propio Juan Valdez a lomos de su borrica.

11 comentarios en “Ecotimo

  1. María

    jajaja pues oye, tienes mucha razón… A mí en todo caso me seducen más cadenas como Cal Ametller, que no son ecológicos exactamente sino kilómetro cero. Eso sí que mola.
    Por cierto, ya sabéis que entré aquí y comenté que me sobraban unos 5 o 6 kilitos y que no había manera… Al final he decidido que son 8 o 10 y me he tirado al mundo Pronokal. Cuando no se puede, no se puede. Es caro, pero como no estaré mucho en Fase 1 (al ser relativamente poco peso), no gastaré un fortunón. Hace unos siete años lo hice y perdí unos seis kilos y muy bien. Llevo dos días y dos kilos… Es duro, pero francamente, para mí menos duro que una dieta equilibrada hipocalórica… es que no puedo, no las aguanto, me muero de hambre… Ya os contaré qué tal!!! Besos.

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    1. Un gordo cualquiera Autor

      Desde la demencial dieta del sirope a la que me sometí, yo no creo en ningún método con apellidos para adelgazar, llámese Pronokal, Dukan o Perico de los Palotes, pero es uno quien tiene que probar qué le vale y qué no, así que te deseo lo mejor pero siempre con salud y con la cabeza sobre los hombros, no ya para evitarse el temido efecto rebote si no sobre todo para no lesionarse el organismo. Un besote, María :*

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  2. Daniela "La Luchadora"

    Hola.
    Me sorprende cuando leo que en España sean mas caros los alimentos «sanos». En mi país, las verduras son bastante económicas, lo que sale caro son los carbohidratos y toda la variedad de carnes; sin embargo, por cultura: comemos más carbohidratos y muy poca verdura y la carne depende del nivel economico supongo… Pero, yo te hablo de los mercados, antes llamados «tambos», allí es económico, donde hay miles de puestos y miles de compradores y caminas para hallar verduras por 1 boliviano menos (1 lechuga grande, para 2 cocinadas para 4 personas con abundantes porciones cuesta cada una 2.50 bolivianos, y 1 dolar equivale a 8 bolivianos). Pero, como decía, si vas al «Super-mercado» como hipermaxi, fidalga, ketal,etc, donde hay 1 solo dueño y se supone que todo tiene mas condiciones de salubridad, todo duplica, triplica y hasta cuadriplica los precios… No te sale barato ni las verduras… Obviamente es porque contratan persona, pagan luz, agua, empleados, publicidad, etc., y si se supone que sus alimentos no estan contaminados, pero es tan caro, que no conviene comprar. Otro punto, es que en mi país muchos alimentos estan contaminados con parasitosis, especialmente las verduras, y se las puede lavar con lavandina (se aprende en la universidad), pero bueno… Esa es otra historia.
    Solo queria comentarlo.
    Saludos…

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    1. Un gordo cualquiera Autor

      ¡Hola, Daniela! Qué bueno tenerte por aquí : )
      Veo que llego tarde. María te contestó a la perfección, mucho mejor de lo que yo lo hubiera hecho.
      Por cierto: si no habilitas en tu blog la opción de admitir comentarios por todos los cauces posibles no podré comentarte, porque ni Blogger ni WordPress reconocen mi identidad : /

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  3. María

    Daniela, no, aquí las verduras y frutas son más baratas que la carne o hidratos. El post se refería a tiendas con verdura y fruta ecológica, que son cultivos relativamente pequeños, no es la verdura y fruta que se vende en las tiendas y supermercados habitualmente. Por eso es más cara, un beso!

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      1. María

        Daniela, pues por lo que te comentaba, porque son cultivos más pequeños, lo que se produce de forma «industrial» es siempre más barato, ya que se abarata el proceso. Por ejemplo, la carne ecológica necesita más espacio, ya que las vacas o gallinas no están hacinadas, sino en libertad, y por eso son granjas familiares, más modestas. Yo compro a veces a productores locales y son cultivos de varias familias asociadas y así pueden cubrir gastos.. Un beso!

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  4. Alicia Aprendiendo

    Ecorrobo diría yo….
    Si vives en un pueblo como yo, las verduras y frutas son mucho más baratas.
    Además son alimentos de primera necesidad, como la carne, perscado, leche y huevos… ¡¿ Por qué engañan a la gente?!
    A mi de vez en cuando me gusta darme caprichos, pero no en ecotiendas, si no en alguna tienda gourmet.. ahí sé que me la van a clavar, pero no timar.
    Puse una entrada con el menú hasta el 3 de noviembre, por si te apetece pasarte.

    Beso.

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  5. Pili

    Creo que has aprendido la lección. Por mi barrio hay varias de estas tiendas desde hace años y, por lo que dices, no son tan caras. Se nota que hay competencia, jeje. Yo no compro casi nunca pero he de reconocer que algunas cosas están riquísimas. Nada que ver la leche de almendras de marca veritas con la del súper.
    Ah! no nos dices si has perdido peso o has ganado, espero que hayas perdido unos gramitos.
    Hasta pronto!!

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